El grupo Instituto Bernabeu abre en el centro de Madrid su sexta clínica y garantiza el embarazo o devuelve el importe
23 de febrero de 2018
Es referente internacional en el tratamiento del fallo de implantación embrionario y de baja reserva ovárica aplicando investigación propia en sus tratamientos personalizados
Instituto Bernabeu es uno de los primeros centros de reproducción asistida en España. Entre sus logros se cuenta el nacimiento del primer bebé FIV de la Comunidad Valenciana en 1988 y ahora abre su clínica en la Comunidad de Madrid. En un momento en el que la infertilidad se está frivolizando y mercantilizando, siempre se han distinguido por una profunda ética profesional que ha hecho que pacientes de más de 64 países hayan confiado su problema reproductivo para conseguir ser padres. Es un referente para los casos difíciles que buscan investigación, personalización y genética aplicada. De hecho, a ellos corresponde la identificación de los genes asociados a la baja reserva ovárica en el año 2016, lo que ha planteado la posibilidad de ser madres a mujeres con edad avanzada con sus propios óvulos.
Ha sido el primer centro europeo en ofrecer el programa de Garantía de embarazo, un compromiso con el paciente al que devuelve el importe pagado si no logra la gestación. El programa está respaldado por miles de casos de éxito logrados a lo largo de sus tres décadas de experiencia. Uno de sus hitos es el haber logrado el nacimiento de la primera niña libre de ceguera hereditaria (retinosquisis) en 2004, y otro, el nacimiento del primer niño en el mundo libre del síndrome de Marfan en 2006. Líderes en investigación, Instituto Bernabeu mantiene una continua labor de estudio que ha dado como fruto el ser expertos en los casos de infertilidad más complicados y para ello cuenta con unidades de aborto de repetición y de baja respuesta ovárica donde son referentes internacionales. El nuevo centro de Madrid ofrece una intervención global donde la calidad asistencial y la personalización son prioritarias.
No banalizar la salud reproductiva
El centro de medicina reproductiva ofrece a sus pacientes la posibilidad de descartar más de 600 enfermedades genéticas a través del test de compatibilidad genética (TCG); un estudio que realiza como protocolo a los donantes de semen y óvulos. En ovodonación y embrioadopación la clínica es líder, y ello gracias a su labor médica e investigadora y a sus firmes principios éticos y de calidad en la asistencia. El director médico del Grupo Bernabeu, el doctor Rafael Bernabeu, destaca que la nueva clínica lleva al barrio de Salamanca un centro de élite asentado en la máxima de que cada paciente es único. “Hay muchos centros que no dan garantías y la salud reproductiva no es algo banal, por eso es importante no perder el tiempo. La infertilidad no es un problema estético ni las soluciones son las mismas para cada mujer y tienen una complejidad que hay que abordar de una forma seria, profesional y personalizada”, advierte el ginecólogo, vicepresidente de la sección de esterilidad e infertilidad de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetrica (SEGO). “Confiamos en nuestro trabajo bien hecho y en su excelente resultado. Y en que contamos con la mejor capacidad técnica, humana e investigadora para aplicar las técnicas que sean necesarias para alcanzar el éxito”, añade el responsable del Grupo Instituto Bernabeu.
Medio de cultivo personalizado
Por eso, tan importantes son los medios técnicos de última generación como otros aspectos fundamentales como, por ejemplo, que el medio de cultivo en el que se alimenta cada embrión sea único y personalizado, con la seguridad de que nunca volverá a reutilizarse. Entre la última tecnología con la que cuenta destaca un novedoso aparato encargado de medir la calidad del aire que valora los compuestos orgánicos volátiles del ambiente con el objetivo de que a la hora de extraer a los embriones de sus incubadoras tengan la garantía de que no hay elementos contaminantes que les puedan afectar. La clínica está dotada de incubadoras embrionarias de baja concentración de oxígeno, microscopios y microinyectores de última tecnología, así como ecógrafos 3D y 4D con un software especializado en el estudio de la cavidad endometrial y la reserva ovárica.