fbpx

Foro Blog

Reproducción asistida de los egipcios a nuestros días. La evolución del hombre buscando el embarazo

Reproducción asistida de los egipcios a nuestros días. La evolución del hombre buscando el embarazo

A lo largo del transcurso de la humanidad, la fertilidad y la reproducción han sido epicentro de nuestra curiosidad y conocimiento. Infinidad de religiones, culturas e investigaciones para desentrañar los misterios de la vida e indagar en métodos de tratamiento para la infertilidad. ¿Cómo han evolucionado las técnicas de reproducción asistida a lo largo de los años?

Representación Butanesa del origen de la vida (detalle)

La infertilidad siempre ha sido un tema de atención en la práctica médica y también en el plano social, filosófico y ético. Este interés refleja la incertidumbre y las preguntas del ser humano acerca de sus orígenes y su futuro. A través de la historia y sus civilizaciones, la reproducción asistida ha ido evolucionando y avanzando año tras año.

La reproducción desde la prehistoria a la civilización egipcia

Ya en la prehistoria, la reproducción, se demuestra eje de la civilización. Como testigos, contamos con numerosas pinturas rupestres y figuras femeninas redondeadas, representando numerosas “venus”, que invocaban la fertilidad y prosperidad. El desconocimiento del papel de varón en la reproducción, potenció el concepto de «Diosa madre de la fertilidad».

El Papiro Ebers, el más importante sobre medicina egipcia

Comenzando por los egipcios, los papiros son nuestra principal fuente de conocimientos sobre la medicina egipcia. Los dos papiros más relevantes son el papiro Kahoun, el texto médico egipcio más antiguo conocido y primer tratado de ginecología (1900 AC) y el papiro Ebers, el cual fue escrito en la XVIII dinastía (1550 AC) y es el texto médico más famoso de la época.

Childbirth scene, Kom Ombo Temple
Escena de parto, Templo de Kom Ombo

Los egipcios fueron pioneros en el desarrollo del diagnóstico temprano del embarazo tratando granos de trigo con la orina de las mujeres embarazadas; las mujeres embarazadas debían orinar sobre una mezcla de trigo y cebada combinada con arena y dátiles; si los granos germinaban (por la acción de la hormona hCG), estaba embarazada: si sólo crecía el trigo el hijo sería varón, si sólo crecía la cebada sería mujer.

El avance en el conocimiento de la reproducción, les permitió ser pioneros en el desarrollo de los primeros métodos anticonceptivos. Utilizaron la corteza o resina de acacia por sus propiedades espermicidas, así como su fruto mezclado con miel y dátiles. También los excrementos de cocodrilo que introducían en el interior de la vagina a modo de tampón (muy probablemente por sus propiedades alcalinas, que también son la base de los anticonceptivos actuales).



Muchos se han aventurado, a raíz del descubrimiento de un jerogrífico del templo de Luxor, dónde se representa al Dios Min, deidad de la fertilidad, con el pene erecto en cuyo extremo se ve perfectamente definido un espermatozoide (ver imagen), a creer que los egipcios habían sido los primeros en descubrir el gameto masculino. En la actualidad, se ha demostrado, que la forma coincide con la representación jerogrífica de la «purificación y limpieza», y es una mera coincidencia la forma tan similar con un espermatozoide. La humanidad tuvo que esperar más de 3000 años, hasta el desarrollo del microscopio de 1080 aumentos, para su descubrimiento.

Civilización judeocristiana

Pasando a la civilización hebrea, una de las principales fuentes de conocimiento relacionada con la medicina judía es la Biblia. En los orígenes de la cultura judeo cristiana, no se abordó la infertilidad, más allá de la aceptación del repudio a la mujer que no concebía, dado que no contemplaba que el origen de la esterilidad fuera masculino.

El avance griego de Hipócrates

La medicina occidental encuentra sus primeras bases en Grecia. El cambio más relevante vino de la mano de la escuela de Hipócrates. Él quiso un sistema médico coherente con el racionalismo de los filósofos griegos. Dónde se abandonaba la superstición, la religión y la «magia», tratando al paciente primero desde el estudio y análisis de su problema, para en segundo lugar, ofrecerle un tratamiento.

A pesar de ello, el conocimiento de la infertilidad era muy limitado, y partía de bases erróneas, como la vinculación del aparato reproductor con el digestivo, por lo que la mayoría de tratamientos no resultaban eficaces.

Los griegos fueron los primeros en vincular los hábitos de vida sanos y una correcta alimentación con la fertilidad.

Roman childbirth relief image, Necropolis of Isola Sacra: Tomb 100,
Relieve Romano de escena de parto, Necrópolis Isola Sacra, tumba 100.

Edad Media

Los médicos en la Edad Media utilizaron distintas «recetas», actualmente totalmente denostadas, para diagnosticar el origen de la infertilidad. Una de éstas, inspirada en los egipcios y griegos y adoptada por el médico valenciano Arnau de Villanova (c.1240-1311), consistía en insertar un diente de ajo en la vagina, si el olor se transmitía a la boca de la mujer entonces era fértil.

También en España, nuestro rey Alfonso X el Sabio, fue un pionero en la descripción del proceso reproductivo, la esterilidad y el conocimiento obstétrico ginecológico, en sus «Cantigas a Santa María» (detalle en imagen superior).

Parto por cesarea. Miniatura turca. al-Firdawsî\’s Shahnama
Caesarian.  miniature page of al-Firdawsî\’s Shahnama (topkapy Biblioteca)

El avance renacentista

Madonna del Parto (Piero Della Francesca)

Hacia 1600, emergieron otros médicos como Ambroise Paré (1517-1590), famoso cirujano, que defendió la dilatación del cérvix para el tratamiento de la infertilidad. El anatomista y botánico italiano Gabriel Falopio (1523-1562), describió las trompas junto con el clítoris, la vagina y la placenta. En 1651 el médico y anatomista inglés William Harvey (1578- 1657) presentó una nueva teoría acerca del desarrollo embrionario humano.

Hasta el momento se creía que el futuro bebé preexistía como un ser humano preformado diminuto (homúnculo), dentro del espermatozoide. Esta teoría se conocería como preformacionismo. Harvey postuló, que las estructuras especializadas que un individuo desarrollaba paso a paso provienen de estructuras no especializadas a partir del ovocito. Esta teoría se conocería como epigénesis.

Metodología científica

En el siglo XVIII el razonamiento médico sufrió una transformación y comenzó la metodología científica. El científico holandés Anthony Van Leeuwenhoek (1632-1723) en 1677, y su asistente, Hamm, fueron las primeras personas que visualizaron espermatozoides, a los cuales llamaron “animálculos”.

Hacia 1785 el cirujano escocés John Hunter (1728-1793) realizó los primeros intentos de inseminación artificial humana, resultando en el nacimiento de un niño sano ese mismo año.

Dibujo anatómico feto (Leonardo Da Vinci)

Primera inseminación artificial de donante

En el año 1884 en Filadelfia (USA) se produjo el primer caso confirmado de inseminación artificial de donante (IAD), llevada a cabo por William Pancoast en el Jefferson Medical College.

En 1944 se crea la Asociación Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) y el equipo de John Rock en Harvard comunica uno de los avances más importantes en medicina reproductiva, la fecundación in vitro (FIV) de ovocitos humanos.

En 1958 se administran los primeros extractos de gonadotrofinas pituitarias humanas conteniendo hormona folículo-estimulante (FSH) y hormona luteinizante (LH), consiguiendo inducciones ováricas satisfactorias. Además, también se introduce el citrato de clomifeno como medicación oral para la estimulación ovárica controlada.

1978. Primera Fecundación In Vitro

En 1973, el equipo de Monashen consiguió el primer embarazo mediante técnicas de fecundación in vitro, aunque la gestación sólo duró unas pocas semanas. El 25 de Julio de 1978 se consigue un hito histórico: nace Louise Brown, la primera niña en el mundo tras fecundación in vitro y reimplantación embrionaria en Reino Unido, conseguido por los doctores P. Steptoe y Robert G. Edwards, nació en el Royal Oldham General Hospital en Inglaterra. En España, el primer nacimiento por fecundación in vitro fue el 12 de julio de 1984 en Barcelona; nació Victoria Anna a las 37 semanas de gestación.

La aportación de las técnicas de congelación y el ICSI

El primer nacimiento a nivel mundial tras criopreservación y descongelación lo llevó a cabo el equipo australiano dirigido por Trounson y Mohr en el año 1983. Ese mismo año, este grupo publicó el primer nacimiento a partir de donación de ovocitos. Seguidamente se consiguió el primer embarazo de ovocitos donados mediante FIV y transferencia embrionaria (TE). En Australia también se comunica el primer embarazo proveniente de embriones congelados-descongelados.

En 1992 tiene lugar una verdadera revolución en el campo de la medicina reproductiva con la introducción de la microinyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI). Esta técnica consiste en la inyección intraovocitaria directa de un único espermatozoide viable y posibilita el embarazo a varones que presentan deficiencias espermáticas. Actualmente es la técnica de elección para tratar el factor masculino severo.

¡Y llegó la genética!

A partir de 1990 se aunaron dos ramas científicas, por un lado, las técnicas de reproducción asistida y por otro la biología molecular, para dar lugar a un área biomédica, el diagnóstico genético preimplantacional (DGP). En este año se publica el primer embarazo en humanos tras biopsia embrionaria preimplantatoria para determinar el sexo de embriones con riesgo de padecer enfermedades ligadas al sexo.

El trabajo de los científicos empezó a dar resultados a finales del siglo XX o principios del año 2000, cuando se empezaron a tener protocolos nuevos que mejoraron notablemente el proceso de congelación y se los resultados se optimizaron. Su uso se extendió y, desde ese momento, ya con la técnica de vitrificación o congelación ultrarrápida.

Últimos avances

La criopreservación de embriones ha sido una técnica utilizada desde principios de los años ochenta, aunque entonces se utilizaba básicamente la congelación lenta. En los laboratorios de hoy, se utiliza el proceso de vitrificación de embriones y ovocitos, que evita la formación de hielo y, por tanto, el daño que se le puede causar al embrión debido a los cristales. Con la vitrificación tal y como se lleva a cabo, consigue tasas de supervivencia embrionaria cercanas al 100%, preservando el potencial de implantación.

Además, se están poniendo a punto nuevas técnicas de selección y mejora de muestras seminales mediante la técnica de magnetic-activated cell sorting” (MACS). Se trata del uso de unas micropartículas magnéticas unidas a una proteína (anexina V) que se une a su vez a uno de los marcadores (fosfatidilserina) que hay en la parte externa de la membrana de estos espermatozoides programados hacia la muerte celular y que, tras aplicar un campo magnético, quedan retenidos dejando pasar a aquellos espermatozoides óptimos. También se está investigando en poner a punto técnicas no-invasivas de selección embrionaria como la metabólomica y el time-lapse.

Las nuevas tecnologías están suponiendo un extraordinario progreso en el diagnóstico de la fertilidad. El último avance que se ha incorporado a las técnicas diagnósticas se denomina array-CGH. La técnica array-CGH analiza el genoma completo de un individuo en busca de ganancias o pérdidas de material genético, permite identificar duplicaciones o ausencias de pequeñas regiones cromosómicas. El futuro plantea un nuevo horizonte gracias a la secuenciación masiva.

Las técnicas de reproducción asistida están permitiendo cambios, a menudo radicales, en el esquema social y la aparición de nuevos modelos familiares. La infertilidad siempre ha sido un tema de atención en la práctica médica y también en el plano social, filosófico y ético. Este interés refleja la incertidumbre y las preguntas del ser humano acerca de sus orígenes y su futuro.

Hitos de Instituto Bernabeu

Nuestra actividad asistencial está unida al desarrollo de una intensa labor investigadora y docente. Fruto de los cuales cabe destacar los siguientes hitos:

  • Primer embarazo FIV en la Comunidad Valenciana, 1987.
  • Primeros y únicos casos de embarazo conseguidos con espermátidas en España.
  • El primer nacimiento mundial, en verano del 2004, de una niña libre de padecer ceguera hereditaria (retinosquisis).
  • Primer nacimiento mundial, en febrero del 2006, de un niño libre de padecer Síndrome de Marfan, aplicando MDA.
  • Descubrimiento en 2016 de los genes que intervienen en la reserva ovárica.

Conoce más sobre nuestra trayectoria e hitos.

Hablemos

Le asesoramos sin compromiso