Síndrome de Asherman y sinequias
La existencia de adherencias dentro del útero o la oclusión de la cavidad endometrial es un reto para aquellas mujeres que desean gestar y no lo consiguen
¿Qué es el Síndrome de Asherman y las sinequias uterinas?
Las sinequias uterinas se definen como adherencias patológicas (uniones) entre las paredes uterinas. Generalmente están ocasionadas por la realización de procesos ginecológicos dentro del útero como legrados, miomectomías histeroscópicas, etc., además en su diagnóstico la histeroscopia juega un papel fundamental.
El síndrome de Asherman se define como la asociación entre la presencia de sinequias uterinas y uno o varios síntomas asociados al síndrome, como disminución o ausencia de menstruación.
¿Cuáles son los síntomas del Síndrome de Asherman?
Los síntomas más frecuentes son:
- Alteraciones del ciclo menstrual en forma de reglas escasas (hipomenorrea) y/o ausencia de menstruación (amenorrea).
- Infertilidad que puede ser por:
- Dificultad del espermatozoide para ascender hasta la trompa o la cavidad uterina cuando las adherencias obstruyen su entrada.
- O por alteración de la cara interna del útero que dificulta la implantación del embrión.
- Complicaciones durante el embarazo en forma de alteraciones en la formación de la placenta durante el desarrollo embrionario o abortos de repetición.
¿Cómo se diagnostica el Síndrome de Asherman?
El diagnóstico principal se realiza mediante la histeroscopia, que nos permite realizar un análisis visual directo, establecer su localización, su gravedad y facilitar su clasificación. Además, permite establecer una evaluación del endometrio y determinar el procedimiento quirúrgico más adecuado para su tratamiento.
Existen varias clasificaciones de las sinequias uterinas, siendo las más utilizadas la de la Asociación Americana de Esterilidad (AFS) y la de la Sociedad Europea de Endoscopia Ginecológica (ESGE).
La aparición de las sinequias se relaciona con:
- La realización de legrados repetidos.
- La eliminación de miomas por vía histeroscópica, siendo el riesgo mayor cuando realizamos la resección de más de un mioma o de miomas enfrentados.
- Otras técnicas de cirugía histeroscópica, como las polipectomías o la resección de tabiques, también puede ocasionar sinequias.
- En cuanto a la embolización de los miomas, es el tratamiento que se asocia con una mayor tasa de aparición de sinequias, por lo que nunca se debe proponer a mujeres que deseen quedarse embarazadas.
¿Cuál es el tratamiento y pronóstico para el Síndrome de Asherman?
El tratamiento es la histeroscopia, principalmente mediante la utilización de histeroscopios diagnósticos ya que no se precisa realizar ningún tipo de preparación dilatación cervical, porque en los casos de sinequias puede aumentar el riesgo de perforación uterina. Actualmente se recomienda la utilización de geles antiadherenciales a base de ácido hialurónico tras la histeroscopia ya que se ha demostrado que disminuyen la tasa de reincidencia.
Tratamiento según el tipo de sinequias:
- La sinequias leves se eliminan fácilmente por el efecto combinado de la distensión líquida y del histeroscopio. En el caso de sinequias moderadas necesitamos utilizar tijeras o minielectrodos bipolares. Se debe conseguir finalmente una cavidad uterina normal, con la visualización de las zonas de los orificios tubáricos en el mismo plano.
- En el caso de sinequias uterinas complejas se requiere la presencia de un cirujano ginecológico experto, ya que se asocian con mayor riesgo de complicaciones, así como un alto riesgo de fracaso y de reincidencia. Es importante reseñar que a veces se requiere de la realización de varias intervenciones hasta su solución.
En cuanto al pronóstico tras el tratamiento, se estima que se consigue la restauración de la menstruación en un porcentaje muy alto de pacientes.
La tasa de recaída en la histeroscopia de control es también alta por lo que todas las guías recomiendan la realización de histeroscopia diagnóstica o de un posterior control tras su tratamiento.
En cuanto a la Fertilidad, un amplio porcentaje de pacientes recuperan su capacidad reproductiva, aunque la recuperación de la misma depende de factores como la edad, la gravedad de las sinequias y la causa: son de peor pronóstico las secundarias a embolización de miomas, la recidiva en la histeroscopia de control o la regularización del ciclo menstrual de forma postoperatoria.
Las gestaciones obtenidas tras el tratamiento de un Síndrome de Asherman tienen un riesgo muy alto de alteraciones en la placentación (formación de la placenta), así como un riesgo elevado de hemorragia postparto.
Tratamiento integral en el Instituto Bernabeu
Al tratarse de una patología compleja, generalmente se requiere de más de una histeroscopia diagnóstica o terapéutica con el fin de normalizar la cavidad uterina. El número de histeroscopias a realizar es variable en función de la gravedad y severidad de las sinequias uterinas.
En Instituto Bernabeu cuenta con equipos de histeroscopia de vanguardia y un equipo de ginecólogos formado específicamente para el tratamiento de pacientes con sinequias uterinas y síndrome de Asherman. La reversión y el seguimiento de esta patología hacen especialmente importante la experiencia y destreza del médico.
Nuestro objetivo es la corrección de estas adherencias sin que suponga un estrés económico adicional, por lo que ofrecemos la posibilidad de un «pack de tratamiento integral» en el que se incluyen todas las histeroscopias que pudieran ser necesarias con sedación anestésica, y el uso de gel antiadherencial que disminuye el riesgo de recidiva. En casos en los que es necesario, se utiliza tecnología Versapoint®. Pida más información.