¿Las contracciones uterinas anómalas son las causantes del fallo de implantación del embrión?
El fallo implantatorio, definido como el fracaso de reiteradas transferencias de embriones, sigue siendo un misterio puesto que no siempre se conoce su causa. Una de las posibles explicaciones es un exceso de las contracciones del útero.
El útero es un músculo y por tanto tienen actividad contráctil. La intensidad y dirección de las contracciones se modifica a lo largo del ciclo menstrual. En los primeros días su sentido es descendente, lo que ayudaría a la expulsión de tejido menstrual. A medida que avanzan los días, las contracciones cambian de sentido y son ascendentes, alcanzando su máxima intensidad alrededor de la ovulación para facilitar el ascenso de los espermatozoides y aumentar las posibilidades de embarazo.
En la segunda mitad del ciclo las contracciones tienden a desaparecer, dejando el útero en una situación de reposo, conveniente para la implantación del embrión. Esta situación de reposo es inducida principalmente por la progesterona.
Como decíamos una de las causas posible de fallo implantatorio podría ser una anomalía en la intensidad y/o dirección de las contracciones en el momento implantatorio.
Con el fin de poder diagnosticar la contractilidad uterina, hemos validado una técnica en la que se evalúan las contracciones uterinas mediante vídeo-ecografía vaginal justo antes de la transferencia embrionaria, así como los valores de progesterona. Esta contractilidad puede ser medida tanto en modo bidimensional como en modo tridimensional, siendo los únicos que aplicamos esta técnica. Además, hemos podido comprobar que la contractilidad medida de este modo tiene una alta asociación con niveles bajos de progesterona, pudiendo distinguir entre aquellas pacientes con contracciones por niveles de progesterona bajos y aquellas con contracciones uterinas por alguna irritabilidad en el musculo, como puede ser que suceda con la endometriosis.
Con esta información adquirida podemos individualizar los tratamientos de las pacientes, en especial a aquellas que sufren un fallo repetido de implantación, mejorando los resultados del tratamiento.
Dr. Rafael Bernabeu, Director Médico del Instituto Bernabeu